Ya es un poco tarde para preparar un suelo con materia orgánica que tenga que descomponerse, pues vas a trasplantar plantas ya grandes que van a necesitar comer bien desde el primer momento. Por eso creo que lo mejor que puedes hacer es cavar un gran agujero para cada planta, al menos de 50 cm de diámetro y lo mismo de profundidad, pero, si puede ser más, mejor. Luego tienes dos opciones: la mejor y la sencilla. La mejor es rellenar los agujeros con una mezcla de ochenta por ciento de tierra de saco y veinte por ciento de humus de lombriz, pero hace falta bastante tierra, pues cada agujero necesitará al menos 100 l. La sencilla es mezclar directamente la tierra que has sacado con humus de lombriz y tierra de saco, seguramente, con 10-15 l de cada tengas suficiente para cada agujero. El humus de lombriz lo puedes sustituir por compost o estiércol bien maduro de vaca, caballo, oveja, cabra o conejo si lo tienes disponible.