Pasar al contenido principal

¿Cómo cultivo las auto en interior?

Me gustaría saber qué diferencias hay en la forma de cultivar las variedades autoflorecientes en interior comparadas con las variedades normales. Hablo del tamaño de las macetas, de los abonos y de las luces, etc.
Óscar

La principal y más importante diferencia tiene que ver con el fotoperiodo. Al contrario de lo que sucede con las variedades tradicionales cuya floración viene determinada por el fotoperiodo, esto es, por la duración de los días y de las noches, en el caso de las variedades automáticas o autoflorecientes la floración es completamente independiente de lo que dure el fotoperiodo. Por lo general, las plantas empiezan a florecer alrededor de dos o tres semanas después de germinar tanto si los días son largos como si son cortos. La maduración de los cogollos y el momento en que deben ser cosechadas las plantas tienen una duración fija que depende de la variedad y no del fotoperiodo. Las auto más rápidas se cosechan unos 55-60 días después de la germinación y las más lentas tardan alrededor de 90-100 días. La duración de los días y la intensidad de la luz no influye en la velocidad de maduración, pero sí en la de crecimiento y en la producción de cogollos. Cuantas más horas de luz y más intensidad lumínica reciben, más crecen las plantas y mayor es la producción. En exterior, esto lleva a que la mejor época para plantar variedades auto sean los meses con días más largos, básicamente entre mayo y agosto. En interior, como el fotoperiodo lo determina el cultivador, se suelen usar de 20 a 22 h de luz diarias y de 2 a 4 h de noche. En realidad, se podrían cultivar autoflorecientes con un fotoperiodo de luz continua 24/0, pero se considera que las plantas se benefician de un corto periodo de oscuridad, que les permite descansar. En interior, las plantas no autoflorecientes necesitan un fotoperiodo distinto en la fase de crecimiento y en la fase de floración, pero las autoflorecientes se cultivan siempre bajo el mismo fotoperiodo desde la germinación hasta la cosecha.

Además del fotoperiodo, hay algunas otras diferencias a la hora de cultivar plantas auto. La primera es que no se suelen trasplantar para evitar estresarlas, ya que, como el periodo de desarrollo es corto, si sufren estrés la producción se reduce. Sin embargo, hay buenos cultivadores que sí las trasplantan, pero lo hacen con mucho cuidado para no alterar ni dañar lo más mínimo el sistema radicular. Por otra parte, no tienen un pan de raíces excesivamente grande y no requieren macetas demasiado grandes. En exterior funcionan bien con 10-15 l y, en interior, con 5-10 l de tierra. Los abonos para variedades autoflorecientes deben tener en cuenta que buena parte del crecimiento de estas plantas se produce al mismo tiempo que la floración, por lo que el contenido en nitrógeno debe ser bastante alto durante casi todo el ciclo, ya que si lo reducimos demasiado pronto las plantas se quedarán más pequeñas y la producción será menor.

Profesor Cáñamo

Suscríbete a Cáñamo